Esta semana pasada se celebraba en Barcelona A vista d’hotel, las terrazas de los mejores hoteles de la ciudad abrían sus puertas con diferentes propuestas cada uno. Yo me enteré muy tarde el mismo sábado, el último día y le dije a mis amigos si les apetecía ir al Majestic. La jarra de agua fría que nos llevamos cuando lo encontramos completo! esperamos una horita a ver si alguien se iba mientras tomábamos unas cervecitas… ¡pero nada!
Nos hacía ilusión tomar una copa mientras veíamos Barcelona iluminada a nuestros pies, así que ni cortos ni perezosos decidimos subir al Tibidabo y más concretamente al Mirablau, un bar-restaurante mítico situado en el Tibidabo y desde el cual podríamos disfrutar, parcialmente, de la velada que nos habíamos planteado.
Es un buen sitio al que ir con amigos que vienen de visita, impresiona mucho y ahora en veranito ves como lentamente va anocheciendo.
Eso si, ya sabéis que desde aquí sólo compartimos lo que realmente nos gusta y os recomiendo que si vais a tomar un copa, disfrutéis de una copa de vino, una cervecita fresquita o un gin tonic. Algunos de nosotros pedimos cocktails (a un precio demasiado alto), pensando que el lugar contaría con un buen barman dada la situación y el precio, pero fue una decepción absoluta. De las peores que me he llevado, de verdad. Estaría genial que apostaran por una calidad mínima en este aspecto, seguro que ganarían más público.
Pero en fin, cocktails a parte! ;), ¡es un plan genial para estas noches tranquilas y cálidas de verano que nos esperan!
¡Me muero de ganas, tengo tantos planes para este verano! Y a vosostros, ¿Qué os parece éste?
¡Un abrazote!
